RESPETO A TODO SER, A LA MADRE TIERRA
Si reconocemos, como los pueblos originarios y muchos científicos modernos, que la Tierra es Gaia, Madre generosa, generadora de toda la vida, entonces debemos darle el mismo respeto y veneración que profesamos a nuestras madres. La crisis ecológica mundial deriva en buena parte de la sistemática falta de respeto a la naturaleza y a la Tierra. Respeto implica reconocer que cada ser tiene valor por sí mismo, por el mero hecho de existir y que, al existir, expresa algo del Ser y de aquella Fuente originaria de energía y de virtualidades de la cual todos provenimos y a la cual todos retornamos (vacío cuántico). En una perspectiva religiosa, cada ser expresa al propio Creador. Al captar a los seres como valor intrínseco, surge en nosotros el sentimiento de cuidado y de responsabilidad hacia ellos, a fin de que puedan continuar existiendo y coevolucionando. Las culturas originarias dan testimonio de la veneración ante la majestad del universo, el respeto por la naturaleza y por cada uno de